Esta madrugada se despide la primavera…
con gotas de lluvia,
suspiros de frio,
ecos atronadores.
La primavera dice adiós entre nubes
sin vislumbrar bien su rostro
porque despedirse a cara descubierta exige un atisbo de
grandeza,
de valentía,
de madurez,
de empatía…
Me voy y te dejo sin mis
flores
Me voy y te dejo sin mi luz
Me voy y te dejo sin mis amaneceres
Sin mi revoloteo,
Ni mi ruido
Sin mi noche
ni mis días
Me voy y te dejo sin mí
para que vuelvas a ser tú
Para que cojas todo lo vivido
y te refugies de la tormenta
A pesar del adiós
recuerda que un día fuimos primavera
A pesar del adiós
nos queda el aroma en nuestras pieles
el brillo en nuestros ojos
y restos de frenesí en nuestras bocas
Hoy la primavera pone freno
a los que un día avanzaron a toda velocidad
Dice adiós
y observo que se quita la máscara
Y así, a rostro descubierto,
con las heridas aún a flor de piel
se lleva estas flores marchitas ya
para dejar paso a nuevos amaneceres
Nuevos soles
quizás más radiantes,
quizás más intensos,
quizás más cálidos…
Adiós primavera
bienvenido verano
ILUMINANOS
SE LUZ