jueves, 9 de enero de 2020

DESDE MI GALAXIA ESPUMOSA


Hay personas que nacen de la nada y crecen como la espuma


Como la espuma del mar en un día de Julio

como la espuma de una botella de champán, recién descorchada

como la espuma del último café que nos sirvió de excusa.


Y es que algunos reencuentros precisan de excusas.

Inventamos pretextos para reencontrarnos

para comprobar que seguimos en la misma galaxia, aunque a años luz…


Pero, lo más curioso , es que entre tú y yo siguen lloviendo estrellas.

Y no hace falta mirar al cielo, en Agosto, para contemplar su estampa

ni emborracharnos para ver todo más brillante…

ni inventarnos cafés que no pasan del segundo sorbo…

Hay estrellas porque sigue habiendo magia,

y porque, aunque me busques y no te quiera ver, me sigues encontrando.


Tú desde tu pedazo de  universo y yo, desde mi galaxia  espumosa.

Seguiremos descorchando champán en cada reencuentro

Mientras las estrellas sigan deslumbrándonos…


Pero ya sabes… A años luz.



sábado, 4 de enero de 2020

SOMOS MUNDO


Somos MUNDO,


ese mismo que pisamos y en el que dejamos huella

este que nos sostiene en pie y nos mantiene erguidos

aquel que tiembla, cuando nosotros lo hacemos, pero que nos mantiene firmes.



Somos ese mundo que nos cuida si se siente cuidado

que da su fruto cuando cultivamos cosas buenas en él

pero que se manifiesta y ruge cuando le herimos.



Somos MUNDO

ese mismo que nos baña con sus mares,

que nos calienta con su sol,

que nos cubre con sus árboles

y que permite que respiremos.



Somos MUNDO porque la Madre Tierra quiso que lo fuéramos.



Somos MUNDO porque nos permiten morar en él,

porque nos ceden un sitio en sus entrañas para coexistir en paz, en armonía, en equilibrio,

porque lo hemos heredado y porque otros lo harán en nuestro nombre



Somos MUNDO porque deberíamos ser seres responsables: con él, para él, entre todos.

Somos MUNDO ya que nos pertenece y le pertenecemos.

Somos MUNDO, y puesto que hoy que está herido de muerte, deberíamos devolverle a la vida…


jueves, 12 de diciembre de 2019

PUENTES


Puentes, esos que cruzan de un lado a otro, y te dejan suspendida en el aire…

Puentes por cruzar, o puentes que te atropellan en pleno cruce, por los miles de obstáculos que subyacen en ellos.

Puentes que aceleran tus pasos o te hacen aminorar la marcha.

Lo importante es el camino, dicen…
Disfruta del recorrido, exclaman…
Puentes que te acercan a tu objetivo o en donde se bifurcan los caminos.

Puentes para desandar lo caminado,
Para retroceder lo avanzado,
Para apuntalar lo señalado.

Puentes para disfrutar del paisaje: la claridad de los días, la serenidad de las noches.
Puentes llenos de bruma… desde donde solo se ve oscuridad.

Puentes hechos de hierro, de barro, de piedra,
Resistentes, vulnerables o sólidos…
Puentes de arcilla para modelar con las manos y darle forma a la base.

Puentes que se caen y nos parten en dos… por la fuerza del agua, de lo inesperado, de lo intempestivo…

Puentes que perviven más allá de nuestras civilizaciones; que nos observan, nos vigilan, nos unen…

Puentes que están ahí, esperando a ser cruzados… al otro lado nuestros miedos, nuestras dudas, nuestras inseguridades.

Puentes que representan todo lo bueno que llevas dentro y que se alzan altaneros ellos.

Puentes desde los que observas el infinito y más allá…

Puentes que son un regalo por sí mismos, porque al desandarlos vuelves a casa…

Puentes que anuncian que sí… que ya llegó… que ya es NAVIDAD.


martes, 26 de noviembre de 2019

ACUARELA


Cuando echas la vista atrás
los recuerdos asoman por delante
transformándose en intrépidos escaladores
capaces de llegar a tu cima.

En la cumbre del conocimiento
reside lo que por desconocimiento dejamos a un lado…
al lado de las sombras,
al lado de las ruinas,
junto a lo invertebrado.
Sin un esqueleto capaz de sostener los errores cometidos  ayer
lo oscuro, lo incierto, lo inacabado.

En la cumbre de la desilusión
esparzo un puñado de semillas
por si les da por brotar…
un puñado de vidas inciertas.

En la cumbre de la desesperanza
nace todo aquello que pende de un hilo
y que este Noviembre ventoso amenaza con derribar.

En la cumbre del olvido
escribo mensajes imperecederos
al tiempo que lleno el asfalto de acuarelas de colores
rechazando así el gris de los días.

Permitamos que las lluvias, de otoño, limpien lo que ensuciamos ayer…
Menos las acuarelas
Esas que queden por siempre.



lunes, 18 de noviembre de 2019

ESE BESO QUE NO SE HA DADO


Ese beso que no se ha dado,
ese tren que ya anda lejos.
Nosotros que no dejábamos nada a medias tintas
olvidamos los besos en el tintero.

Y entre paso de estaciones
y trenes que no llegan
O que quizás ya se fueron…
plantamos cara a Noviembre
planteándonos en cambiar el rumbo.

Quizás invirtiendo el rumbo
alcancemos el tren perdido
quizás invirtiendo el rumbo
sellemos los besos con la tinta que nunca se borra,
que jamás se olvida.
Quizás invirtiendo el rumbo
ya no tengamos a Noviembre de cara
y volvamos a ser primavera.

Ese beso que no se ha dado
y que aún guardas en el tintero
escondido y con un candado
lleva escrito un Te quiero